Hoy elaboré dos conclusiones:
Corriendo viento en contra duro la mitad de tiempo que corriendo viento a favor.
Las viejas solas de barrio, de todos los barrios, tienen un perro chiquito, de patas cortas, de razas dudosas, que una vez al día, mínimo, sacan a pasear con la excusa de salir a la calle a encontrar a otras viejas solas de barrio, que hayan salido a pasear sus perros chiquitos, de partas cortas, de raza dudosa, y charlar.
La ventaja, sacar conclusiones.
Corriendo viento en contra duro la mitad de tiempo que corriendo viento a favor.
Las viejas solas de barrio, de todos los barrios, tienen un perro chiquito, de patas cortas, de razas dudosas, que una vez al día, mínimo, sacan a pasear con la excusa de salir a la calle a encontrar a otras viejas solas de barrio, que hayan salido a pasear sus perros chiquitos, de partas cortas, de raza dudosa, y charlar.
La ventaja, sacar conclusiones.
4 comentarios:
Gran conclusión, pequeña corredora. Me mata ese perrito. Es el de Fernando Peña, ¿no? Si lo consiguiera, con esa carita, yo lo tendría. Y me cagaría en el cliché. Beso grande!
Ah no se che quien es el dueño de semejante criatura comestible, yo también tendría uno, pero no sería vieja. Otro beso!
Dos verdades absolutas.
En cuanto a correr viento en contra es verdad que se dura la mitad, pero se utiliza el doble de energia. Como ejercicio es lo mismo pero te destroza psicologicamente el viento. -.-
apuesto a que los perros chiquitos, de patas cortas y de raza dudosa, no son asi de bonitos...
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